En NQ hemos tenido la oportunidad de conocer proyectos donde la bicicleta era el medio logístico que se utilizaba para transportar pequeñas mercancías y valijas.
Un servicio que aplicado a los desplazamientos cortos en pequeñas poblaciones donde las distancias están limitadas resulta excelente, pero en ciudades grandes como Amsterdam, puede suponer una inversión en recursos humanos cuyo esfuerzo redunde en la calidad del servicio.
Foodlogica es un proyecto que ya en sus primeras fases esta ofreciendo una serie de expectativas que permite ser muy optimistas, como modelo de transporte de bienes y enseres aplicando redes de transporte cada vez mas extensas. que cubran los perímetros radiales de grandes ciudades.
Desarrollado por CITIES Foundation el servicio que entro en funcionamiento en Junio pasado se sustenta sobre tres ejes, el primero la utilizacion de la bicicleta eléctrica o E-Bike a lo que se les puede añadir un pequeño remolque.
El segundo punto es el empleo de las energías renovables en este caso la fotovoltaica reduciendo el impacto medioambiental en sus trayectos, y el tercero es la atención al cliente y sus productos principalmente agroalimentarios garantizando su conservación.
Para eso se han creado una serie de nodos de transporte que funcionan como un ecosistema urbano, en los que en unas oficinas modulares construidas con contenedores. Son gestionadas por personal especializado que distribuye las mercancías, teniendo la procedencia y su destino estableciendo un punto equidistante entre ambos, ofreciendo el mejor servicio en proximidad para satisfación del cliente.
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